Por Muriel Peral (Alumna 3er. curso)
Esto va rodado y las páginas suman… pues no es tan difícil esto de escribir un guion de cine… ah, no, que esta secuencia es demasiado explicativa. ¿Cómo lo puedo contar de forma sutil para que vaya haciendo hueco en la memoria del espectador y no quede como que es lo que me interesa a mi, como guionista, para que la historia avance?
Parece que me ha quedado efectivo y sutil, pero… ¿mi protagonista respondería así? ¿no me estoy alejando demasiado de su conflicto interno y de lo que quiere? A ver: si “mi prota” quiere esto y esto es lo que se lo dificulta, ¿cómo puedo hacerlo llegar hasta donde quiero y que sea orgánico? Mejor es que lo borre todo y empiece de nuevo porque me estoy liando.
Venga… sin diálogos explicativos, haciendo avanzar la trama y recordando siempre qué es lo que quiere conseguir mi protagonista. Ahora sí he conseguido la secuencia. Pero, ¿he utilizado la tensión necesaria? ¿no quedará demasiado lenta? ¿este diálogo debería ir aquí o lo dejo para más adelante?… y a todo esto, ¿no he contado algo similar en otra escena? Vale, voy a darle un cambio y permaneciendo en esta secuencia y con la misma tensión, voy a hacerla más rápida con un diálogo más apropiado, pensando en qué y cómo lo diría mi personaje y que no se me olvide que no puede decir lo que ya estamos viendo porque los espectadores se me van a mosquear.
¿Y si empapelo la pared que tengo delante con lo que no se me puede olvidar, qué quiero que se sepa y cuándo es el momento de decirlo? Así lo recordaré a cada momento.
Pues va a ser que me voy a tener que poner los post-it en la pantalla para tenerlo más cerca… voy a darme una ducha a ver si ordeno las ideas.
Pues no, lo sigo viendo igual, no sé por dónde tirar. ¿Y si me pongo la película esa? me puede ayudar a enfocarlo… lo hace tan fácil que no entiendo por qué yo lo hago tan enrevesado. Y mira, aquí el diálogo es largo y te cuenta un montón de cosas y la película está muy bien valorada por los críticos. Ah, ya, es que lo está diciendo en el momento preciso y entra orgánico porque hace un rato ya me puso en situación. Si es que es una obra maestra. Voy a dormir a ver si tengo la suerte de que un sueño me encienda la luz y mañana todo esté más claro.
¿Y a mi de qué me vale soñar que una gata me ataca porque no quiere que acaricie a sus cachorros cuando mi película va de asesinatos? ¿qué ?¿que mi prota tiene que ser más agresivo? ¿que tiene que tener hijos? ¿que tengo que meter un gato en la película?
Bueno, si necesité unos meses para aprender a conducir mi coche, para que no me faltaran manos y ojos, para no atropellar a nadie en los pasos de cebra ni crear problemas cervicales a mis acompañantes, puede que en unos años ya no necesite empapelar la pared.
Voy a adoptar un gato.